Crema de remolacha vegana

¡Muy buenas a todos! Ya veis que esta semana estoy trayendo recetas crudas o prácticamente crudas, todas bastante saludables, fáciles de preparar y con ingredientes que encontraréis en cualquier tienda de alimentación. Hoy toca aprender a preparar una crema de remolacha vegana, cuya base es remolacha cocida, tomate y cebolla.

Recetas con remolacha: lo amas o lo odias

Siento que la remolacha es una de esas verduras que amas u odias, pero que nunca pasa indiferente. Yo reconozco que no es mi vegetal favorito, pero hay en unos cuantos platos que me apasiona el resultado: como colorante para la mayonesa vegana casera que suelo preparar (que me encanta utilizar en burritos, como en estos burritos vegetarianos), como topping para ensaladas, en hummus (¡dios, habéis probado el hummus de remolacha? Es brutal), en salmorejo (lo probé aquí en Sevilla y es una delicia absoluta) y, sobre todo, en cremas de verduras frías, como en este caso.

Antes de comenzar con los pasos para elaborar esta crema de remolacha vegana (y prácticamente cruda) hay que aclarar que la cantidad de los ingredientes anteriores son más o menos orientativos. Son las cantidades que hemos utilizado para la hacer nuestra crema, pero se puede variar u omitir algunos ingredintes. Como por ejemplo: la cebolla cruda, que no a todo el mundo sienta bien.

En cualquier caso, tenéis que saber que hacer esta crema de remolacha es facilísimo. Lo único que tenéis que tener en cuenta es que necesitaremos una batidora de mano o una licuadora de baso que sea mínmamente potente para podr triturar estas verduras.

¡No me enrollo más! Solo recordaros que estoy todos los días por Instagram y que allí subo recetas que no podéis ver en ningún otro lado, además de recomendaciones, restaurantes, viajes y contenidos muy variados.

Vamos con la receta: crema de remolacha vegana.

Crema de remolacha vegana

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Raciones: 4 Tiempo Preparación: 15 min Nutrition facts: 200 calories 20 grams fat

Ingredientes

Dos remolachas cocidas
Dos tomates grandes
Media cebolla mediana
Aceite de oliva

Paso a paso

1. En primer lugar tendremos que pelar la cebolla y el tomate y picarlo bien. Lo metemos dentro del vaso de la licuadora o la plataforma donde trituremos con nuestra batidora de mano. En principio añadiremos tan sólo media cebolla, si esta es fuerte. Si vemos que la cebolla es floja podemos añadir una entera. Es mejor añadir solo media y tras licuarlo todo, añadir más si queremos.
2. Si la remolacha ya está cocida y pelada, la cortamos también y la volcamos en la licuadora, junto con la cebolla y el tomate.
3. A continuación añadimos un chorrito largo de aceite de oliva por encima, para dar un delicioso sabor y ayudar a la licuadora a procesar los alimentos.
4. Licuamos bien todos los ingredientes hasta que quede una mezcla homogénea y cremosa.
5. Para la presentación hemos puesto un poco de maíz dulce por encima.
6. Este plato se puede tomar recién licuado, pero también podemos meterlo durante un rato en la nevera si estamos en verano. Nos refrescará y saciará a partes iguales.

Veganismo fácil y delicioso :-)