¡Muy buenas a tod@s! Hoy vengo con una de las recetas que más me piden cada vez que comparto alguna foto y con una de las recetas que más sorprende cuando la sirvo a algún invitado que no conoce demasiado sobre comida vegana. Os traigo una receta básica y simplificada para aprender a preparar Tortilla de patatas vegana, sin huevo.
Este es uno de los platos más conocidos de la gastronomía española y que más pensé que podría echar de menos cuando me hice vegana. Por suerte para todos, animales incluidos, existe una alternativa maravillosa a las tortillas de patata tradicionales.
Sustituir el huevo por harina de garbanzo
Con el tiempo he ido perfeccionando la técnica y he descubierto que uno de los mejores aliados de la tortilla de patatas sin huevo es la sal negra kala namak, una sal que es conocida por saber a huevo. Durante muchos años hemos preparado la tortilla sin esta sal en casa, así que si no la tenéis o no la podéis comprar ahora mismo, no os preocupéis. Yo siempre la recomiendo porque da un sabor a huevo impresionante y hace que la sustitución del huevo por harina en esta receta pase aún más desapercibida.
Si queréis darle una oportunidad, la podréis encontrar a la venta por Internet y en muchas tiendas ecológicas, herbolisterías y veganas. Un bote grande no suele costar más de 2,50€. Yo compré uno hace 4 años y aún no lo he acabado, así que realmente es muy barato.
El método a seguir para realizar una tortilla de patatas vegana es muy similar a la receta original; la única diferencia es que en vez de batir huevo, vamos a batir una mezcla de agua con harina de garbanzo.
Algunos consejos para hacer una buena tortilla de patatas vegana
Es normal si la primera tortilla no te sale perfecta, porque es normal también que eso pase con las tortillas que llevan huevo. Estas recetas requieren un poquito de mañana y, sobre todo, ayuda mucho tener una buena sartén antiadherente que además pese poco, para que te permita darle la vuelta rápidamente y sin demasiado esfuerzo.
Otra cosa interesante que os puedo recomendar si sois amantes extremos de la tortilla de patatas vegana, es que existen sartenes solo para tortillas que le dan la vuelta sin apenas esfuerzo, pero ya os digo que yo nunca he tenido una, así que no son indispensables.
Por último deciros que, al igual que con la tortilla tradicional, una muy buena combinación es la tortilla de patatas vegana con mayonesa, así que os dejo por aquí el enlace a mi receta para preparar mayonesa casera sin huevo.
Recordad que estoy por Instagram y que allí subo contenido exclusivo :-)
¡Vamos con la receta! Tortilla de patatas veganas, sin huevo.
Ingredientes
3 Patatas medianas
Un vaso de agua
5 o 6 cucharadas soperas de harina de Garbanzo
Pizca de sal
Aceite de girasol
Opcional: 1/2 Cebolla y 1/3 pimiento rojo
Opcional recomendable: sal negra (kala namak), sal que le dará sabor a huevo
Paso a paso
- Pelamos y cortamos las patatas en cubos medianos, les añadimos una pizca de sal y las freímos en la sartén con aceite de girasol (si puede ser poco mejor, que simplemente cubran las patatas ).
- En el caso de que queramos añadirle cebolla y pimiento rojo a la tortilla para que quede más sabrosa, sólo tenemos que picar y añadirlas a la sartén mientras las patatas se fríen.
- Mientras, mezclamos en un bol aparte 5 o 6 cucharadas soperas de harina de garbanzo, con un vaso (mediano) de agua templada.
- Le añadimos una pizca de sal y, si vas a usar sal negra (sal kala namak) es el momento de añadirle 3 o 4 pellizcos. Siempre recomiendo machacar la sal negra antes de añadirla, en caso de que venga en grano grueso.
- Mezclamos bien hasta quedar una mezcla liquida y homogénea.
- Una vez fritas las patatas, las retiramos escurrimos ligeramente el aceite sobrante dejándolas sobre un colador con papel de cocina debajo.
- Apagamos el fuego, dejamos templar el aceite y lo guardamos en un bote de cristal. Recuerda que ese aceite no debe tirarse por el fregadero. Resérvalo para otras ocasiones o llévalo a un punto limpio de recogida de aceite.
- Las mezclamos en el bol con la mezcla de agua y harina (lo que sustituirá el huevo).
- Cogemos una sartén de tamaño medio y que, preferentemente, sea antiadherente y de peso moderado. Engrasamos con un chorrito generoso de aceite y añadimos la masa a la sartén.
- El proceso es el mismo que con las tortillas tradicionales. Al volcar la masa, la repartimos por todo el ancho de la sartén y le damos unos cuantos minutos hasta tostar por debajo. Sabremos que está tostando principalmente porque por encima la masa empezará a secar y, probablemente, a hacer burbujas.
- Cuando esté seca y dorada por debajo, le damos la vuelta (puedes ayudarte con una tapa sin agujeros o un plato que cubra todo el ancho de la sartén).
- Lo bueno de la tortilla de patatas sin huevo, hecha con harina de garbanzo, es que si eres un poco manazas o te falta experiencia y se te rompe, se recompone mucho más fácil que la de huevo.
- ¡Doramos por ambas partes y servimos caliente!
