¡Muy buenas a tod@s! Seguimos con las recetas otoñales. Hoy vengo con una receta vegana que os prometí hace mucho tiempo: este Pastel de Calabaza vegano con crema de vainilla a base de anacardos. Este pastel es una versión bastante simple y accesible, los ingredientes los encontraréis en cualquier supermercado. No quería dejar pasar más tiempo antes de subir esta receta porque me parece la manera perfecta de aprovechar los últimos coletazos de la temporada de Calabazas.
Una receta de temporada: Pastel de Calabaza
Para hacer la receta más fácil, uso harina para bizcochos como base, porque de esta manera no tenemos margen a error con la levadura. La harina de bizcocho viene con la levadura incorporada.
La textura es tierna y cremosa en el interior, es suave y súper saciante, así que te recomiendo servirlo en raciones pequeñas.
Como saborizantes, además de la calabaza, lleva canela, sirope de ágave y ralladura de frutas. Pero lo mejor es que además lleva una cobertura de vainilla, a base de anacardos. Una pasada, de hecho podría comerla sola 😍
Si os soy sincera, antes de probar por primera vez un Pastel de Calabaza estaba bastante desconfiada con el hecho de que la calabaza casase bien en un postre dulce, ya que en realidad estoy bastante acostumbrada a comer calabaza en salado: cremas, revueltos, horneados…incluso como salsas para pasta ¡Pero para nada! El resultado de la calabaza en recetas dulces es realmente increíble.
Pastel de calabaza vegano con crema de vainilla. Recetas veganas fáciles.
Por encima decoré con unas almendras laminadas y unos pellizcos de canela, pero eso es totalmente opcional. La combinación del Pastel de Calabaza con la crema de vainilla ya es perfecta tal y como está :-)
No me lío más, vamos con la receta: Pastel de Calabaza con Crema de Vainilla.
Pastel de calabaza vegano con crema de vainilla
Ingredientes
1 calabaza pequeña
1 taza y 1/2 de harina para bizcocho (lleva la levadura incorporada)
1 taza de leche vegetal
150 gr de anacardos (recuerda: hay que remojarlos 8h antes o cocerlos durante 1h)
150 ml de leche de coco de lata
1 limón
1/2 naranja
Sirope de ágave
Vainilla líquida
Canela en polvo
Aceite de oliva
Paso a paso
- Antes de empezar, dejaremos los anardos remojar durante 8h o bien los coceremos 1h.
- Pelamos la calabaza, la cortamos en cubos y la cocemos en abundante agua, hasta que adquiera una textura suave.
- Mientras, preparamos 1 taza y media de harina para bizcochos. Sin añadir levadura, pues ya la lleva incorporada.
Cocemos la calabaza y preparamos la harina
- Volcamos la harina en un bol y, con la misma taza, calculamos 1/3 de sirope de ágave. Reservamos.
- Rallamos la piel de 1 limón y 1/2 naranja sobre la harina. Mezclamos.
- Añadimos el jugo de media naranja a la harina, mezclamos, añadimos 1 cda sopera de vainilla líquida y volvemos a mezclar.
- A continuación, añadimos 1 taza de leche vegetal al bol.
Preparamos la base del pastel de calabaza
- Con unas varillas, mezclamos bien hasta conseguir una masa homogenea.
- Añadimos la calabaza asada, y volvemos a mezclar bien, hasta que la calabaza se deshaga.
- Yo añadí 1 cda sopera de harina para corregir, vosotros no necesitaréis hacer esto porque ya os he dado la medida correcta desde el principio.
- Añadimos una cda sopera de canela, volvemos a batir.
Añadimos la calabaza y canela
- Volcamos en un bol, engrasado con un poquito de aceite de oliva por todos los costados.
- Llenamos el molde para el horno e introducimos el pastel a 180 grados unos 45 minutos. El interior no ha de quedar seco, sino más bien jugoso pero bien hecho. Si atraviesas con un palillo para comprobar si está hecho y sale ligeramente húmedo, es normal, pues no es un bizcocho.
- Volcamos los anacardos remojados en un bol y añadimos los 150 ml de leche de coco, un chorro generoso de ágave y dos cucharadas soperas de vainilla.
Horneamos el pastel y trituramos los anacardos para la crema
- Batimos con una batidora de mano hasta conseguir una crema homogénea.
- Ya estará listo el pastel, así que los retiramos del horno.
- Dejamos templar el pastel, lo retiramos del molde y lo cubrimos por la crema de vainilla y anarcardos.
- ¡Y listo! Sírvelo del tiempo o frío.
Retiramos el pastel y preparamos la crema
