Para celebrar que he creado una nueva sección de recetas en el blog: recetas veganas con Crockpot / olla lenta, se me ha ocurrido explicaros qué es y por qué podrías necesitar comprar una (o no).
Las Crockpots u ollas de cocción lenta se han puesto de moda en los últimos años. Así como ya estamos más que acostumbrados a hablar, leer y consumir fast food (y todo tipo de comida pensada para no tener que invertir tiempo en cocina), ha llegado un movimiento que juega a la contra y que se llama Slow food, que pretende mostrar las virtudes de disfrutar la comida desde las tradiciones, el placer y lo local. Algo así como la Slow fashion de la comida.
Se trata de un tipo de olla que te cocina durante horas y horas la comida. Un potaje a fuego lento ya es rápido si lo comparas con la Crockpot. Esta olla te cocina desde 30 minutos hasta más de 12h, en una ebullición extremadamente suave que va sacando el sabor y textura de los alimentos de una forma excepcional.
En realidad Crockpot es el nombre de una marca, la primera en comercializarse y la que más fama ha cogido en el mundo de las ollas de cocción lenta. Tanto es así que ahora este nombre de marca se usa como genérico para este tipo de ollas. Por eso, aunque haga referencia a la marca ‘Crockpot’ porque es la que yo tengo, también sirve para otras marcas como Slowpot, Chup chup Matic…
Precio de una crockpot u olla de cocción lenta
Vamos a lo que nos interesa. Existen Crockpots y ollas lentas de todos los precios, desde 25€ a 140€ o más. ¿Por qué tanta diferencia en el precio? Por la diferencia entre tamaño, materiales y algo que yo considero fundamental: no todas tienen temporizador. Para mí el temporizador es uno de los elementos básicos de una olla de cocción lenta. Es básicamente la clave de las ventajas que te expongo a continuación.
Ventaja de cocinar en una Crockpot o una olla lenta
La ventaja más inmediata que vi fue la de meter un montón de verduras y legumbres en una olla y olvidarte hasta pasadas 12h. La programas (si dispone de esa función) y puedes dejar trabajando de manera segura toda la noche o mientras estás fuera de casa y tienes un platazo saludable, saciante y por poco dinero. Sin esfuerzo, recién hecho y listo para comer o meter en un táper para el trabajo. Además, hay Crockpots (la mía lo hace) que una vez acabada la cocción que les has indicado en el temporizador, se activa el modo «mantener caliente» en el que está como en reposo y no deja la comida a temperatura ambiente, evitándote así que se te pueda poner en mal estado si pasas algunas horas de más fuera de casa.
Además es fácil de usar y no necesitas encender fuegos y activar el gas, por lo que puedes cocinar con los peques de la casa, que solo tendrán que darle a un botón.
Otro aspecto a tener en cuenta es que, pese a su tamaño, es mucho más fácil de limpiar que el resto de robots de cocina (también es cierto que no es tan polivalente ). Especialmente la que yo tengo, la Crock-Pot CSC063X con pantalla digital, es antiadherente así que solamente hay que pasarle un poco con el estropajo y listo.
Generalmente una de las ventajas que más se suele destacar es que las propiedades de los alimentos mantienen sus propiedades mejor que cocinados a altos fuegos. Pero algo que yo sí os puedo corroborar es que gracias a la uniformidad de la cocción los sabores se mezclan mejor y las texturas hacen notar que ha sido cocinado con mucho cariño (por ej: las legumbres se cuecen bien, no quedan duras, pero no se deshace).
¿Cuál es el gasto de luz de cocinar durante tantas horas? Eficiencia energética
Además: gasta muy poca luz. Una duda muy frecuente es sobre la factura de la luz cuando usas una olla lenta, ya que lo normal es pensar que el gasto es elevadísimo, pero según las indicaciones de la web de la Crockpot, una olla lenta consume una media de 150 W, más o menos como un ventilador.
Desventajas y consejos sobre la olla lenta
Empezaría destacando el precio, ya que es una inversión y hay que valorar si realmente la vas a dar uso. Son muy variados, como os comenté arriba van desde 25€ a 140€ en función del tamaño, materiales, marca y funciones (programación, temporizador, potencia, etcétera). Y realmente, de comprar una olla lenta, yo siempre recomendaría ir a una de precio medio, porque las más baratas no suelen tener temporizador ni capacidad de ser programadas, y si vas a invertir, asegurarte de que te pueda dar todo de sí.
Aunque seamos justos: si bien es cierto que gastarte 80€ es una buena inversión, también creo que si realmente la usas de manera constante, en unos pocos meses la tendrás más que amortizada. Sobre todo si eres de las personas que no se cocina en casa por falta de tiempo y se compra la comida fuera. A largo plazo todos esos tápers que compras fuera te salen más caros.
En resumen: lógico invertir ese dinero si realmente le vas a dar uso. En el uso de un pequeño electrodoméstico influyen bastantes cosas, y yo después de tantos años cocinando me he dado cuenta de que si tienes que sacarla de tu armario cada vez que vas a usarla: probablemente no la uses.
Así que aquí viene otra pequeña desventaja: generalmente son bastante grandes y ocupan más espacio que una normal. Procura comprar una que se adapte al tamaño de tu cocina y no te haga tener que guardarla demasiado cada vez que quieras usarla.
Dónde comprar y código de descuento en Crockpot y otras ollas lentas
Modelos de Crockpot y ollas lentas hay muchas, y como hemos visto, no suelen ser baratas.
La que yo tengo es magnífica, aunque bastante grande. Es el modelo Crockpot con temporizador de 7,5 Litros, que da para unas 10 raciones. A mí me encanta para cocinar a lo grande y después congelar, pero tenéis un montón de modelos más de olla lenta con temporizador que al ser más pequeños salen más baratos.
Si usáis mi código de descuento en la tienda de Conasi os saldrá más barato.