¡Buenos días chicos! Os pido una disculpa porque esta receta se ha retrasado más de lo que tenía pensado, ¡Pero ya estoy aquí! :-)
Seguimos con las recetas de carácter Otoñal, aunque en España no haya manera de que entre el frío. Ya sabéis que soy una devoradora profesional de Boniatos y que para mi es sin duda lo mejor del Otoño. Hoy os traigo una receta bastante típica pero con un toque particular: Boniatos Rellenos de Garbanzos con una salsa de cacahuete casera que está para morirse. Además hace parecer que es una receta mucho más elaborada de lo que realmente es. Podría ser perfectamente una receta para una Navidad vegana.
Es para mi bastante habitual hacer boniato rellenos de legumbres, arroz o cualquier vegetal, porque prácticamente todas las combinaciones son fáciles y sorprendentes. De hecho ya os dejé hace bastante tiempo una receta similar: Boniato relleno de Portobello y queso vegano. Pero como os decía, esta vez tiene una característica especial: la salsa de cacahuete, que tiene un toquecito de ajo y pimienta negra.
No sólo me encantan por su sabor dulzón, sino porque los boniatos son polivalentes (de hecho por eso veis tantas recetas en el blog): patatas de boniato, bases de pizza de Boniato, salsas para pasta a base de Boniato, … ¡Y la lista no acaba nunca!
Pero sin enrollarme más, vamos con la receta:
Boniato relleno de Garbanzos con Salsa de Cacahuete
Ingredientes
1 Boniato grande
4 cucharadas soperas de Garbanzos Cocidos
Tres puñados de cacahuetes
Pimentón dulce
Pimienta negra
Ajo en Polvo
Perejil picado
Limón
Aceite de Oliva
Leche vegetal sin azúcar o agua
Levadura de Cerveza
Sal
Paso a paso
- Empezaremos pre-calentando el horno a 180 grados.
- Partimos el boniato por la mitad y lo colocamos sobre una bandeja para horno.
- Seguidamente, hacemos un corte de profundidad media a lo largo del boniato (por la parte superior, donde irán los garbanzos)
- Por encima, sazonamos con pimienta negra, ajo en polvo, perejil picado y pimentón dulce.
- Engrasamos con un chorrito de aceite de oliva e introducimos en el horno durante 40 minutos a 180 grados.
- Mientras hornea el boniato, prepararemos la salsa de cacahuetes. Para ello mezclaremos los 3 puñados de cacahuetes, que cubriremos con agua o leche vegetal, un chorrito de limón, una cucharadita de levadura de cerveza, ajo en polvo, una pizca de sal, pimienta negra y perejil picado.
- Trituramos bien la crema hasta que quede lo más homogénea posible. Observamos la densidad y, opcionalmente, podemos añadir más leche vegetal o agua al gusto para hacerla más líquida o cremosa.
Yo recomiendo que la crema sea suave, ligera y más líquida, para que la combinación con los garbanzos y el boniato no sea demasiado densa.
- Cuando ya tengamos nuestra salsa lista, la dejamos reposar a temperatura ambiente.
- Continuaremos preparando los garbanzos. Cogemos nuestros garbanzos cocidos y los especiaremos con las mismas especias que hemos usado para el boniato: ajo en polvo, perejil y pimienta negra.
- Pasados los 40 minutos, retiramos los boniatos del horno sin apagarlo. Con la ayuda de una cuchara o un cuchillo, vaciamos una pequeña parte del interior del boniato, para colocar los garbanzos. Tal y como podéis ver en la foto de abajo.
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Añadimos por encima un chorrito de limón y volvemos a introducir el boniato durante 10 minutos a 180 grados.
- ¡Pasados los 10 minutos ya están listos! Los retiramos del horno y le añadimos un poquito de salsa de cacahuete por encima. ¡Sírvelos calientes!